Manifiesto

Somos Tribu.

Nuestro nombre evoca las ideas de comunidad, vínculo, pertenencia, territorio y cultura, porque estos son los elementos de base para posibilitar una democracia.

Nuestro nombre también hace referencia a lo antiguo porque trabajamos para dar forma al futuro, reconociendo los aprendizajes de la historia. Al innovar nos preguntamos qué es lo que queremos conservar.

Somos Tribu.

Existimos para ampliar los esquemas con los que pensamos el futuro; para mover la frontera de lo que consideramos posible.

Somos Tribu.

Concebimos la democracia como una dinámica de convivencia, en la cual las personas somos capaces de reconocernos como parte de un mismo nosotros y, por tanto, nos organizamos como iguales para convivir en diversidad, libres y plenas.

Buscamos fortalecer el nosotros y contribuir a que lo que nos une, sea más fuerte que lo que nos separa de quienes podamos considerar los otros.

Somos Tribu.

Existimos para impulsar la transición hacia marcos institucionales que hagan de lo político algo intrínseco a todo ser humano, y que sean coherentes con los tiempos que vivimos.

Buscamos una interacción cotidiana en la que nos relacionemos teniendo el vínculo, la responsabilidad y la dignidad de ser iguales en soberanía.

Buscamos la distribución del poder, la cohesión social y la afectividad como base para la interacción humana.

Somos Tribu.

Exploramos los desafíos, las oportunidades y los dilemas asociados a cada alternativa para el futuro de la democracia.

Nos declaramos “enamorados del problema y no de la solución”. Buscamos aprender. Nos importa poner el tema sobre la mesa y abrir la discusión.

Somos Tribu.

Nos planteamos cuestionamientos profundos, no para encontrar lo que nos sea fácil de abordar o dentro de los límites aprendidos de lo “posible”; sino que aquello imprescindible, lo más importante. Comenzamos con el “qué”, para luego encontrar el “cómo”.

Somos Tribu.

En nuestro corazón late el fuego de los dioses que la mitología griega cuenta, Prometeo tomó del Olimpo para distribuir entre la humanidad; el fuego de transformación que aviva Shiva con su danza; el fuego que Rolando Toro llamó la luz y el calor que nace en la mirada; el mar de fuegos relatado por Eduardo Galeano, en el que cada persona brilla con luz propia entre todas las demás. Este fuego nos enciende y nos reúne; es calor y luz, sabiduría y creatividad, poder y abundancia; un impulso futurista para transformar la realidad.

Somos Tribu: la raíz para distribuir el poder y contribuir al bien común.